¿Qué puede ser mejor que tener contactos de investigación que nos hagan visitar un lugar tan encantador e icónico como Florencia? No hay muchas oportunidades así.

Wagner y yo visitamos un grupo en Italia para discutir propuestas de investigación y desarrollo tecnológico. Los proyectos siguen siendo confidenciales, pero tan pronto como sea posible, estaré muy feliz de compartir con ustedes las novedades sobre el proyecto en el que nos estamos embarcando.

Pero como estaba allí, bueno … era inevitable disfrutar del verano en Toscana. Hermoso, estaba lleno de turistas y hacía un calor abrasador, a pesar de que era el comienzo del verano en Europa. La región me recordó, en muchos sentidos, al Alentejo, donde se encuentra el Campus IAC en Portugal. La cocina mediterránea de altísima calidad, el ambiente bucólico y la extraña vegetación, aún al margen de los grandes desarrollos urbanísticos, fueron puntos destacados.